Tequila, decoradora de interiores 30 enero 2013 Tequila amaneció con un guille de decoradora de interiores.  Ella opina que la alfombra luce más moderna si está doblada en pliegues y se encargó de enrollarla ella misma, porque yo no habría entendido su visión.  Ya que los pañuelos están en una caja tejida a mano, lo más lógico era darles a estos un toque artesanal y los rediseñó a manera de papel picado mexicano.  Otra idea es pasar la moda de los jeans rasgados al cover del sofá y por qué no, también a las orillas de la cama. Por supuesto, no puede faltar el toque deshilado (técnica milenaria de Aguascalientes y el centro de México) a las fundas para almohadas.  La vida da tantas vueltas, que quizá Tequila tenga en su código genético traza de algún ancestro mexicano. La secadora de pelo y otros útiles de arreglo personal, deben estar en el piso por inclusión de los miembros de la familia que miden menos de 30 cm de estatura.  Lo último que está haciendo es correr como posesa y rayando en el límite de velocidad permitida por toda la casa, haciendo constar -en caída libre- todos aquellos objetos que estorban el paso (quizá sea una nueva técnica de feng shui que desconozco).  Va a terminar agotada y entonces, para aprovechar el tiempo de decoración, descubrirá un nuevo rincón para dormir (lamentablemente sólo apto para miembros de la familia con menos de 8 lbs/4 kgs de peso); como dentro de la despensa, sobre la nevera, dentro de la maceta de trinitarias en flor o sobre el ordenador portátil).  Una piensa que está a la moda hasta que le llega alguien con gustos más vanguardistas y refinados. ¡Qué ciega fui! Si alguien quiere probar, se la llevo un rato, sin afectar (relativamente) su bolsillo, ya que ella lo hace sin ánimos de lucro.  Fin del comunicado.