20 febrero
Cerré los ojos como a las 3:00am de hoy. Acostada en cama se sienten
de repente las sacudidas y me he empezado a inquietar. Un poquito de todo,
creo; ver a los Cachanillas asustados, el clima tan increíblemente cambiante,
calorcito, frío, cielo nublado, resolana, viento helado… escuchar que años pasados
no había temblado así, que está temblando también en Oaxaca y en México…
¡Cielos!, que si el Hospital General estaba pensando en recibirnos de nuevo
ya ésta semana, olvídate y peor, que esos días de práctica suspendidos deben ser
recuperados después… la cosa se pone difícil, supongo que causa incertidumbre
no saber qué va a pasar, en realidad el temblor que pasa puede ser el último en otros
5 años o el aviso de otro que está por venir.
Hoy a las 7:30 hubo ensayo del coro. Va a haber un drama para Semana Santa
con intervención del coro. ¡¡Extraño mucho mi coro en San Luis!!, espero que
esté echándole ganas para su propia presentación en la Iglesia.
Esto es de fin informativo, no para asustar gentes sino para recordarnos que
no podemos darnos el lujo de no estar preparados para lo que pueda suceder;
no obstante estamos en manos de Dios y con él el temor no es perpetuo y recordaré
que he dicho muchas veces igual que el salmista “no temeré aunque la tierra sea removida”,
y se trata de decirlo pero actuarlo también.
23 febrero
Genial, hoy tuvimos una carne asada en casa de Ana y Noel. Las carnes asadas son
muy frecuentes en Mexicali. Es algo muy de aquí. Pero lo que más me gustó fue la
convivencia que hubo con los jóvenes, porque se trataba de la primera reunión de
jóvenes universitarios (mayores de 20 años) y me gustó mucho la dinámica de grupo
que ellos manejan. Claro que la carrilla no se hace esperar, éstos chicos son muy
ocurrentes y muy divertidos, además de que nos recibieron con mucha camaradería,
ha sido en verdad medular para mí que las personas de ésta congregación nos hayan
recibido así, pues hace mucho menos difícil adaptarse.
24 febrero
Hoy nos visitaron a la Iglesia, la mamá de Karla y su jefe, de Protección Civil.
Ellos nos explicaron sobre los temblores, la manera en que se presentan y lo que
hay qué hacer. La mamá de Karla nos habló sobre la protección y la importancia
de no entrar en pánico, y claro, sobre no hacer caso de rumores. Tuvimos hasta
un simulacro para saber qué hacer en caso de que un temblor nos sorprendiera
en el Templo y sobre la importancia de identificar áreas seguras en casa.
Qué bien tener atención integral en la Iglesia.
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