No soy un pecado.
No soy esa persona
que te parece fascinante
pero de la que te debes alejar.
No soy tu peor ni tu mejor error,
porque no soy un error.
No soy una memoria para enterrar,
Una historia para lamentar;
No soy un desliz,
Un deseo imposible,
Una historia irremediable.
No soy una causa perdida,
No soy una mala broma,
Un desvío del "buen camino":
No soy una piedra en el arroz.
Soy eso que tomaste
sabiendo ya desde antes que era tuyo,
-tuvieras de ello conciencia o no.-
De no ser así, no me habría dejado tocar;
-tuviera de ello conciencia o no.-
Soy una promesa posible.
Una catarsis a punto,
Otro cuello para un arado;
Soy alas y soy nido.
Soy ser humano,
Polvo y aliento.
Soy una buena copa,
Una pena que vale;
Soy aprendizaje en cicatriz.
Soy don otorgado de antemano
para ser asumido.
Soy voluntad,
Sueño por el cual no rendirse;
Soy hueso, historias y piel.
Soy menos de lo que dicen,
Soy más de lo que imaginan,
Soy toda cual tú me conoces:
Soy de ti.
Aún hoy, todavía soy de ti.
|