Aniversarios, cumpliendo aniversarios.
Para celebrar con alegría
la vida que queda después de la vida.
Para llorar las ausencias, muertes irremediables
y las ganas desganadas de volver a caminar.
Aniversarios, cumpliendo aniversarios.
Ciclos de vida que apenas respiran
para ofrecer quizá su último aliento
justo al final del túnel, al final de las ganas,
de los sueños garabateados en el alma, en el papel.
Tinta, sangre, borrón y enmendadura.
Páginas rasgadas, clausuradas, vueltas hacia atrás
y los aniversarios, los de cada día,
cumpliéndose sin piedad.
26.07.15