TED 08 enero
Oye amor, quizá no lo sabes,
pero ya vivo en otra casa.
Me siento muy feliz de haber logrado
este proceso aunque siempre me gana
un poco de la cultura que me educó
y me pellizca la idea de que una chica
que ya vive en casa propia
se perfila a eso, a la soledad.
No tengo nada contra la soledad.
Creo que incluso viviendo contigo
necesitaría mi espacio
(gato territorial) de vez en cuando.
Pero me asusta que esa marca cultural
aplique, que no haya redención
y tú no llegues.
¿Qué tan hijo eres de tu cultura?
Después se pasa esa debilidad,
esa duda, ese pellizco.
Y sé que una propiedad
es una propiedad.
Y que aquí o en otra parte
seré ama de tu casa.
Y que además de todo lo que
hoy eso implica, estando tú
bajo el mismo techo, cual sea,
te hornearé galletas,
te haré el desayuno y mis miauses
tendrán el doble de amor,
cual ocupan.
|