04 Ricardo Arjona



Puente


I

Habana,
siempre a las mitades, tan mitá española, tan mitá africana
saben bien las olas que en cada ventana siempre hay un testigo

Habana,
juran los que saben que no saben nada pa' entender lo tuyo.

Habana,
tan cerca y tan lejos como esos espejos que reflejan nada
unos al bloqueo otros a un trineo que jamas vio nieve

Habana,
no ha podido Dios ni los seiscientos santos entender lo tuyo.

Mientras la Florida que es como esa tía que se fue a otro lado
se sienta a extrañarte en la Hialeah de las coincidencias
y yo que no toco vela en este entierro muero por la pena,
de no hacerle al mago y construir un puente de noventa millas
para que los primos corran a abrazarse como se merecen
y la ideología no se meta más en lo que no le importa,
que la historia es larga, y la vida es corta.

II

Hay un cubano en La Habana, vendiendo habanos prohibidos
se le han quedado en la cama tantos sueños dormidos
un cubano en La Habana, que es inventor de futuros
bloqueado a la americana, al enemigo cianuro,
un cubano en La Habana, un cubano en La Habana,
que no es culpable de na'.

Hay un cubano en Miami, rencores por tradición
South Beach es su varadero, la Ocean su malecón
un cubano en Miami, tercera generación,
que habla de asera y consorte con la misma canción
un cubano en Miami, un cubano en Miami,
que no es culpable de na'.

Que se sequen los pies los que persiguen la Florida, 
y otros se lavan las manos con jabón de diplomacia
ni el bloqueo es remedio ni aferrarse es la medida,
cuando manda el orgullo siempre reina la desgracia.

Puente,
habría que hacer un puente
pa' unir a tanta gente
en medio del conflicto
ha vivido y vive
gente.

Puente
habría que hacer un puente
pa' unir a tanta gente,
quizás la diplomacia
no ha sabido hacer un
puente.

El tiempo malgastando
el reloj de arena en tanto esperar

III

Vamos a hacer un puente, un puente hermano
vamos a unirnos todos con este tumbao,

Allá en Pinar del Río
se siembra bajo el sol,
tabaco contra el frío,
salsita con béisbol.

Vamos hacer un puente, un puente hermano
vamos a unirnos todos con este tumbao

Qué fácil ve el bloqueo
un yuppie en la oficina;
domingos al buceo,
merienda en la piscina.

Vamos hacer un puente, un puente hermano
vamos a unirnos todos con este tumbao

Cayeron las cortinas
murió la guerra fría
el Kremlin ya está en ruinas
¿quién quiere más espías?

Vamos hacer un puente, un puente hermano
vamos a unirnos todos con este tumbao

Guaracha a la cubana
con Celia y los Van Van
hay rastros de La Habana
en Londres o en Milán.

IV

Hay ruidos de la habana
por toda la ciudad
Coral Gables, Hialea,
Calle 8, Lincoln road.
Cubanos que a escondidas
extrañan la otra orilla.
Baracoa, Santiago, Pinar del Río,
Camaguey, Matanzas, Varadero.
Y allá en la vieja Habana
Vedado Miramar.
Hay rastros de nostalgia
por alguien que se fue.

Cubanos del mundo
con acento asiconpado
En Roma o Budapest.
Tocando sones del pasado
en D.F. o Key West.
La clave, el swing,
las curvas de mujer.

Nadie gana la batalla
todos pierden, es así.
La política esta lejos de Juan,
María, Luis, Alberto, Lupe.
No importa donde vivan
si es aquí o allá a la otra orilla.
Ellos viven, ellos sienten.
Las medidas son pa' gente
no pa muros de concreto.
La historia es un suicida
que revive años después.

Aquí no hay bandos, solo hermanos.
Si me quieren de testigo
yo diré que no entendí.
Ya me dijo aquel amigo
caminando el malecón.
Yo no sirvo de enemigo
si hace tiempo me rendí.

Vamos a hacer un puente, que se unan todas las manos
y el tiempo sana heridas que no puede el rencor.

Vamos a hacer un puente
pa' unir a tanta gente,
vamos a hacer un puente.

Suavecito

Suavecito me pusiste todo en su lugar
suavecito como un juego para armar;
empezaste corrigiendo males al azar
como al barro el alfarero
como brisa de aguacero
conquistaste suavecito

Colocaste besos justamente en el lugar
suavecitos, cirugía para curar
las heridas que dejó el pasado sin sanar
y en el caos de mi infierno
instalaste tu gobierno
y arrazaste suavecito

Suavecito,
fuiste casi imperceptible
sin prisa de a poquito
colocaste tu bandera inamovible
Suavecito, fuiste tan demoledora
pasito con pasito
tu paciencia arrolladora
me salvó suavecito

Suavecito fue ganando con saber perder
suavecito, sin afanes de imponer
con la calma que viene del tacto de mujer
como huella de gaviota
como se forma una gota
me atrapaste suavecito

Me aceptaste como un cero izquierdo y sin valor
me peleaste, sin nada a tu favor
con la suavidad con la que se mueve un rumor
como el paso de un anciano
con paciencia de artesano,
me salvaste suavecito

Suavecito,
fuiste casi imperceptible
sin prisas, de a poquito
colocaste tu bandera inamovible
Suavecito, fuiste tan demoledora
pasito con pasito
tu paciencia arrolladora
conquistó suavecito


 
Un caribe en Nueva York

Recién llegado de Manhattan
con el pescuezo arremangado para atrás
más mojado que un pescado
de ilusión una quimera
va silbando por la quinta "ojalá que llueva café"
-¿dónde vivirá mi tío, en el Brooklyn o en el Bronx?-

Llegó en balsa a Puerto Rico
vedía mariscos en Piñones y en San Juan
pero un día de polizón se fue en barco a Nueva York
con los sueños que llevaba y los sueños que dejó
se le jorobaba el alma al Caribe en Nueva York.

Y piensa en ella, en su mulata, mirando al cielo
mientras se acuesta en una banca en Central Park
con New York Times se hace un colchón y mira al cielo
mientras me cuenta la historia que hoy les canto
la historia de un Caribe en Nueva York.

Y qué hace un Caribe en Nueva York
que no sea pasar frío y calor engañando a la soledad.
Y qué hace un Caribe en Nueva York
que no sea extrañar lo que dejó y vivir soñando con volver.
Y qué hace un caribe en nueva York


Le hablaron de un factoría de primer mundo y de una oportunidad
-que es cuestión de un par de años para poder ahorrar-
y se deshoja el calendario y el frío se hace calor
y le manda a su mulata unas caricias de papel.

Y piensa en ella, en su mulata, mirando al cielo
mientras se acuesta en una banca en Central Park
¿como tú tas? me dijo el tipo mirando al cielo
mientras me cuenta la historia que hoy les canto
la historia de un Caribe en Nueva York.

Y qué hace un Caribe en Nueva York
que no sea pasar frío y calor engañando a la soledad.
Y qué hace un Caribe en Nueva York
que no sea extrañar lo que dejó y vivir soñando con volver.
Y qué hace un caribe en nueva York


Soñaba con ser pelotero
-short stop de los Yankees de New York-
pero se casó a los veinte y fue padre un mes después
y mientras Sammy Sosa conecta otro Home Run
el Caribe busca un sueño que es el mismo que dejó.

Y qué hace un Caribe en Nueva York
que no sea pasar frío y calor engañando a la soledad.
Y qué hace un Caribe en Nueva York
que no sea extrañar lo que dejó y vivir soñando con volver.
Y qué hace un caribe en nueva York


Vientre de cuna

Me gusta verte hablar de la cocina
con la seriedad que Gorvachov aborda el tema
de la caída de su cortina.

Me gusta verte remendar mi pantalón
que hubiese ido a dar a la basura
si hubiese sido otra la situación.

Me gusta verte sonreír cuando lo normal era llorar.
Me has gustado siempre y hoy me gustas mucho más.

Porque sin aludir a la fortuna,
aquella noche de luna
tu vientre se hizo cuna,
trayendo el fruto de algo mutuo.
Y es que es tan sagrada tu labor,
que pariendo con dolor
materializas el amor,
volviendo humano el sentimiento.


Me gusta verte en el supermercado
escoger los abarrotes
según la economía nos haya tratado.

Me gusta ver tu abdomen de perfil
que viene a recordarme
que de una nueva vida seré yo el albañil.

Me gusta verte ese swing que has adoptado al caminar
y es que me gustas toda, incluso verte estornudar.

Porque sin aludir a la fortuna
aquella noche de luna
tu vientre se hizo cuna,
trayendo el fruto de algo mutuo.
Y es que es tan sagrada tu labor,
que pariendo con dolor
materializas el amor,
volviendo humano el sentimiento.


Me gusta verte en el supermercado
y tu swing al caminar y tantas otras cosas,
pero más me gustarás cuando alguien te llame "mamá"


México

Mi madre me encomendó a la virgen de guadalupe
tomé mi guitarra, mis cosas y me fuí rumbo al norte
crucé la aduana de guatemala con más miedo que ganas.

Entré recogiendo las musas que dejaron tiradas
Chava Flores, José Alfredo y el mismo Agustin Lara
y con los restos fuí formando un quién diría y una primera vez,
y estaba solo con un Jesús verbo, no sustantivo en la garganta.

Estaba en México, sin un centavo me sentía un hombre de éxito
México, México, el destino me pintó el camino que me trajo hasta aquí

No sé si fueron los tequilas, pero hablé con Negrete
aquella noche en el Tenampa que acabó al otro día
y en División del Norte tomé un taxi que después fue canción.
Estaba tan desesperado esperando su turno
con una ensarta de canciones el animal nocturno 
y el miedo se convertía en respeto
por cantarles aquí en la misma tierra
de Manzanero, la Beltrán y Pedro Vargas.

Estaba en México, sin un centavo me sentía un hombre de éxito
México, México, el destino me pintó el camino que me trajo hasta aquí

Caminando en la alameda, me platicaba una anciana
"Pedro Infante está vivo, pasa todas las mañanas"
y es que aquí, lo que se ama nunca muere.

Estaba en México, sin un centavo me sentía un hombre de éxito
México, México, el destino me pintó el camino que me trajo hasta aquí



•● Citando en Mayo 2016 ●•
 
»Escribir no es
transformar el ego
en sustancia, sino
diluirlo para que
no envenene.«

-Kenneth Moreno May
Colombia.
 
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